Todos Somos un Poco Raros (Seth Godin) Recomendado

El mercado de consumo masivo que fabrica productos normales para gente normal lo inventaron organizaciones que tienen que mantener sus fábricas y sus sistemas funcionando de manera rentable.

Detente un segundo y piensa en la naturaleza regresiva de esa frase.Primero fue la fábrica, la cual condujo al mercado de masas. No al revés.Las instituciones típicas (una compañía de seguros, un sello discográfico, una fábrica de camas) no podían permitirse una personalización masiva, no podían permitirse hacer un producto diferente para cada usuario. La mentalidad era así: este es el próximo disco de The Eagles. Tenemos que hacer un disco que sea comprado por la masa, porque, de lo contrario, no será un éxito y las masas comprarán otra cosa.Todo se basa en esta idea de que todo el mundo es igual, al menos por lo que respecta al marketing.Los profesionales del marketing llegaron a la conclusión de que cuanto más se ajustase el mercado a la rígida definición de masa, más dinero ganarían.La masa nos proporcionó rentabilidad y productividad, haciéndonos (a algunos) ricos. La masa nos proporcionó naciones enormes, concediéndonos (a algunos) poder. La masa permitió a los poderosos influir en millones de personas, otorgándonos (a algunos) el control.Y ahora, la masa se muere.La corriente ha cambiado de sentido, y la masa como motor de nuestra cultura ha desaparecido para siempre. Ahora, el mundo tiene más información, más opciones, más libertad y más interacción. Y sí, más rareza.Esa idea puede resultarte incómoda. Si tu trabajo gira en torno a encontrar a las masas, crear para las masas, o vender a las masas, este cambio parece muy amenazador. Algunos, sin embargo, lo consideran la oportunidad de su vida. El fin de las masas no es el fin del mundo, pero sí representa un cambio enorme, y este manifiesto te ayudará a reflexionar acerca de la oportunidad que representa.

Fuente Leader Summaries.

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